Andimac lamenta que en España sólo se inician la mitad de las viviendas que los hogares que se constituyen. Una muestra del acelerado envejecimiento del parque inmobiliario actualmente en uso, según los datos de los últimos Informes de Mercado del Observatorio 360 a nivel de Comunidad Autónoma, que recogen las previsiones para el sector y analizan el impacto de los fondos europeos en cada Comunidad.
En concreto, entre enero de 2021 y enero de 2024 la evolución de los hogares en España creció en 805.256 unidades. En esos tres años, la vivienda iniciada fue de 403.230 unidades. Por tanto, hay una diferencia de 402.026 unidades entre los hogares creados y la vivienda nueva en favor de los primeros, un dato que ayuda a entender por qué la vivienda responde en primer lugar a un problema de oferta. Cualquier medida que no atienda de forma nuclear a este desequilibrio muy probablemente no acertará en la solución.
A la necesidad de desarrollar vivienda, y además en condiciones de accesibilidad económica, se añade el estado del parque edificado. Un estado que desde la organización empresarial califican de “preocupante” porque el 83% de las viviendas del país tienen un problema notorio de eficiencia energética, pero también de accesibilidad, acústica y conservación.
En este sentido, cabe recordar que a nivel nacional se reformarán 1,8 millones de viviendas, sólo un 1% más que en 2023. Sin embargo, impulsar la calidad prestacional de estas reformas es crítico para mejorar la calidad y modernización del parque construido. Por este motivo consideran útil que desde Vivienda se promoviera una guía de buenas prácticas para los trabajos de reforma interior.
Tan solo una comunidad autónoma registra más vivienda iniciada que hogares creados: se trata del Principado de Asturias, donde de 2021 a 2024 la evolución de los hogares creció en 7.873 unidades frente a la vivienda iniciada, que fue superior: 8.467 unidades. Una diferencia de 594 entre los hogares creados y la vivienda nueva en favor de la segunda.
En general el mercado de materiales en edificación residencial y terciaria (tanto en obra nueva como en rehabilitación y reforma) se espera que tenga un año positivo en una gran mayoría de regiones: Andalucía , Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia, La Rioja, Navarra y País Vasco; y disminuye en Aragón y la Comunidad de Madrid.
Impulsar los Libros del Edificio
A pesar de estas cifras, la patronal espera que la Administración Central, junto al resto de administraciones públicas, impulsen la elaboración de los Libros del Edificio Existente, un documento técnico que incluye un diagnóstico de cada bloque de viviendas y un plan de actuaciones que ayudará a los propietarios a garantizar el buen estado del edificio para las próximas décadas, lo que evitará el peligroso envejecimiento del parque inmobiliario español.
Y para ello, opina que la puesta en marcha de un Ministerio específico de Vivienda puede ser determinante. Durante 2020 y 2030, más de 370.000 viviendas cumplirán 50 años y deberán pasar una inspección e informe de evaluación edificatoria. Una palanca clave para sensibilizar y ofrecer hojas de ruta adaptadas a las necesidades de las comunidades para garantizar la seguridad del edificio, sus prestaciones y confort y el valor de las viviendas.
Amenazas para los fondos europeos
Con respecto a los fondos europeos, Andimac cree que España está ante una oportunidad de oro para mejorar de forma clara la calidad del parque edificado en términos de prestaciones. Por este motivo, y con el objetivo de crear una cultura de la reforma entre las familias y las pequeñas comunidades de propietarios, en un contexto favorable gracias a las ayudas comunitarias, desde la patronal quieren potenciar la figura de los asesores en rehabilitación energética del canal profesional, quienes también podrían contribuir a ahuyentar las amenazas que se ciernen para la ejecución de los fondos europeos.
Desde la Asociación agregan que, tras los fondos y la transposición de la nueva directiva de Eficiencia Energética de los Edificios, España no puede asumir como país el riesgo de no impulsar medidas intensas en materia de rehabilitación edificatoria, lo que conlleva dotación presupuestaria directa (ayudas a las familias) e indirecta (incentivos fiscales).
A su juicio, no hacerlo no sólo no permitirá cumplir los compromisos de descarbonización ligados al ahorro energético, sino que supone un riesgo creciente para la pérdida del valor de los inmuebles, donde reside el 70% del ahorro de las familias. En especial enfatiza la necesidad de trasponer con rigor y ambición la directiva europea de deficiencia energética de los edificios, y hacerlo de la mano de los sectores productivos implicados en un horizonte de colaboración público privada más intensa.
Según el secretario general de Andimac, Sebastián Molinero, “el sector de la reforma y la rehabilitación será crucial para solucionar el problema de la vivienda que sufrimos en España, pues permite aumentar la oferta y relajar los precios en las zonas más tensionadas. Los fondos europeos nos brindan una oportunidad histórica que, sin embargo, corremos el riesgo de desperdiciar”.