El informe Consumer Insights Suvey 2019, elaborado por PwC en 27 países, muestran que el denominado apocalipsis del retail no está justificado. De hecho, parece mostrar lo contrario. En los últimos cuatro años, se ha duplicado la cifra de españoles que utilizan los canales de compra digitales al menos una vez a la semana, pasando del 7% al 20% de la población en el caso de los smartphones; del 8% al 15% en el de las tabletas; y del 15% al 25% en PC.

Pero, en paralelo, también ha crecido la cantidad de personas que acuden a las tiendas físicas con esa misma periodicidad, pasando del 40% al 48% de los consumidores, según el estudio. La tendencia no es exclusiva de España, sino que se repite en todo el mundo, aunque cambiando ligeramente los porcentajes y con alguna peculiaridad. En España, el principal dispositivo para comprar online sigue siendo el PC, mientras que en el resto del mundo es ya el teléfono.

No obstante, la conclusión es general: los consumidores de todo el mundo han dictado sentencia y quieren tener una experiencia integrada y multicanal al comprar. El estudio muestra, pese a ello, que hay productos y servicios más proclives a la compra online que a la física y viceversa. Las reservas de hoteles y alojamientos, así como los billetes de avión y tren, se adquieren mayoritariamente por Internet. La ropa, los libros, los videojuegos y la electrónica también tienen un alto número de compradores digitales, mientras que la alimentación sigue siendo el sector que más se resiste a la compra a golpe de clic, sobre todo los frescos. Otra tendencia que se está imponiendo, y que confirma el estudio de PwC, es el auge de la conveniencia en las compras de alimentación –cestas más pequeñas y en locales de cercanía, pero que se realizan con una frecuencia mayor–, así como el peso que están adquiriendo factores como la sostenibilidad en la decisión de compra de los consumidores. Un 65% está dispuesto a pagar más por aquellos producidos localmente y un 50%, por alimentos orgánicos.

 

LA VENTA ONLINE AUMENTA EL DÉFICIT COMERCIAL
No obstante lo anterior, la facturación del comercio electrónico en España ha aumentado en el tercer trimestre de 2018 un 29,9% interanual hasta alcanzar los 10.116 millones de euros, según los últimos datos de comercio electrónico disponibles en el portal CNMCData.  Si nos fijamos en el número de transacciones, en el tercer trimestre de 2018 se han registrado más de 170 millones de transacciones, un 34,7% más. El saldo neto exterior (la diferencia entre lo que se compra desde el extranjero a sitios webs españoles y lo que se compra desde España al extranjero) arroja un déficit de 2.863 millones de euros. Por número de transacciones, el 40,2% de las compraventas se registran en webs españolas y el 59,7% en webs del extranjero.

El volumen de negocio de las transacciones con origen en España y dirigidas hacia el exterior ha sido de 4.787 millones de euros, un 36,8% más que en el tercer trimestre del año anterior. El 94,5% de las compras desde España hacia el exterior se dirigen a la Unión Europea, mientras que los ingresos de comercio electrónico dentro de España (compras hechas en España a webs españolas) han aumentado un 14,6% interanual hasta los 3.405 millones de euros.